Obzor es una pequeña ciudad situada en la costa búlgara del Mar Negro, justo a medio camino entre Varna y Burgás. Pertenece al municipio de Nesebar y a la provincia de Burgás. Hace poco escribí sobre la cercana Nesebar, y aprovechando las vacaciones en la costa iré escribiendo sobre diversos lugares de la costa búlgara que merece la pena ver.
Como muchas poblaciones costeras de Bulgaria, Obzor tiene su origen hace miles de años. Los tracios la llamaban Navholos, en el siglo I a.C fue una colonia de Mesembria (actual Nesebar) que los griegos llamaban Heliópolis; más tarde los romanos la rebautizaron como Templum Iovis, luego los otomanos Gözeken, y el actual nombre de Obzor lo tiene sólo desde 1936.
Tiene apenas 2.000 habitantes, pero en los últimos años, durante julio y agosto su población se multiplica por diez, ya que vienen turistas de numerosos países a pasar sus vacaciones (principalmente rusos, escandinavos y de países balcánicos).
En los últimos 10 años ha experimentado un gran cambio y se ha convertido en un destino turístico muy codiciado en el Mar Negro. Se han construido recientemente muchos hoteles de cadenas internacionales, lo que aumenta en gran medida la capacidad de alojamiento del pueblo, que hasta hace relativamente poco contaba sólo con algunos hoteles de tamaño mediano y las habitaciones que alquilan los habitantes a los turistas.
De hecho algunos de estos macro hoteles están sospechosamente cerca del mar, literalmente en la arena, y alguna vez se han llegado a inundar las plantas bajas si coincide marea alta con oleaje fuerte. Esto indica que probablemente en algún momento alguien se ha pasado la Ley de Costas por el forro. Chanchullos de este tipo hay en todos los países cuando hay dinero de por medio.
Nosotros vamos a ver Obzor cada año, básicamente porque en el pueblo de los suegros no hay ni tiendas ni restaurantes, ni una mísera farmacia, y para comprar comida tenemos que acercarnos a poblaciones más grandes (o sea, cualquier otra). La primera vez que estuve en Obzor no había casi nadie y ahora en agosto está petado, pero en junio y la primera mitad de julio es genial, y también la primera de septiembre.
¿Qué tiene de atractivo Obzor?
1. Una playa fantástica.
La playa de Obzor es una enorme bahía de 10 km (dicen que es la más larga de Bulgaria), con arena fina y dorada, y agua limpia. Como toda la costa búlgara, esta playa también está orientada al Este. Todavía no está tan masificada como otras playas del litoral, y aunque agosto es el mes más concurrido, aún se puede plantar la sombrilla sin estar pegado al vecino.
Algún año ha habido medusas, pero no es lo habitual. Hay socorristas cada poco, pendientes de la gente, y los bañistas suelen ser jubilados o familias con niños pequeños, es decir que el ambiente es relativamente tranquilo.
Para los más inquietos hay numerosas actividades aventureras, como windsurf, parasailing, motos acuáticas, etc.
Lo que más me gusta a mí de esta playa (podéis reíros) es que la gente es normal, con aspecto normal. Gorditos, delgados, fofisanos, piel blanco nuclear o rosa gamba... No hay bañistas del tipo supermodelo mega fashion que te hacen sentir fatal. ;)
2. El parque de Palmas:
El parque de Obzor está al lado de la playa, de hecho una parte llega hasta la arena. No es muy grande pero está muy bien cuidado, hay columpios para los más pequeños, fuentes, bancos, glorietas, mucha sombra... Ideal para ir con niños o sentarse a comer un helado o una rica palachinka (crep). Hay un pequeño teatro que se utiliza para conciertos y eventos similares, y se pueden ver restos del templo romano de Júpiter.
3. El centro de Obzor:
Hay una hermosa fuente en la cual están escritos los 7 nombres de la ciudad, una torre del reloj, un ajedrez gigante... Los habitantes de Obzor ponen todo el verano stands de souvenirs, material de playa, comida para llevar, etc. Agobia un poco pero es bonito y al fin y al cabo, viven de esto.
En verano suele haber espectáculos gratuitos de música y baile. La última vez que fuimos, por ejemplo, había un bonito show en el centro en el que adolescentes de varios nacionalidades representaban los bailes típicos de sus países, vestidos con trajes tradicionales. Por lo que me contaron, les invita el Ayuntamiento y se pagan las vacaciones dando varios espectáculos de ese tipo.
En Obzor hay también un pequeño museo que reúne una colección histórica y etnográfica con objetos que comprenden desde el siglo V a.C hasta la actualidad. Eso sí, confieso que nunca lo he visto abierto y tiene pinta de abandonado.
Además hay una pequeña iglesia ortodoxa que por dentro es simplemente maravillosa, con unos frescos muy coloridos y alegres, y un iconostasio precioso.
Durante el verano hay muchos bares, clubs, restaurantes, y hasta una discoteca en las afueras, aunque casi todo cierra en cuanto acaba la temporada turística, a principios de septiembre.
Mi restaurante favorito en Obzor es el "Studen Kladenets" (nombre que significa "pozo frío"). Un típico restaurante familiar con trato excelente, children-friendly, que ofrece comida tradicional búlgara deliciosa y a precio estupendo. Una comida para seis nos suele salir a 20-25 euros, aproximadamente, aunque no solemos pedir postre.
4. Fortaleza de Kozyak, a las afueras de Obzor.
No puedo aportar muchos datos porque no he ido nunca, sólo sé que está entre Obzor y Byala (el pueblo de al lado) y que apenas quedan los cimientos y restos de alguna torre.
5. Área protegida de Irakli:
A 9 kilómetros al sur de Obzor se encuentra el área protegida de Irakli. Como el acceso es complicado, (hay que ir en coche a través de caminos muy, muy rurales, cruzando cultivos) hay mucha menos gente.
La playa (de 3 km) por tanto está bastante vacía de turistas convencionales, y está permitido acampar, por lo que es habitual ver tiendas de campaña en la arena. Es una zona realmente preciosa y que no haya edificios a la vista la hace aún más atractiva.
Irakli fue declarada área protegida en 1994 porque es hábitat de especies raras y en peligro de extinción como el lirio de arena.
Antes ibamos una vez al año, pero este verano hemos visto unos carteles que indicaban que está prohibido plantar ahí tu propia toalla, y que el alquiler de sombrilla y tumbona cuesta 36 levas. 18 euritos de nada. No sé qué se han fumado, pero en otras playas búlgaras eso cuesta como mucho 5 levas, y en Burgás incluso es gratis. Pues adiós, Irakli, que te disfruten los ricos.
Resumiendo, en general me gusta Obzor porque el tipo de turismo que atrae es bastante familiar y tranquilo, no como Sunny Beach que es más agobiante, y porque aunque empieza a ser un sitio conocido aún no está demasiado masificado. ¡Esperemos que dure!
¿Habéis estado alguna vez en Obzor? Si no conocéis la zona, os la recomiendo.
Como muchas poblaciones costeras de Bulgaria, Obzor tiene su origen hace miles de años. Los tracios la llamaban Navholos, en el siglo I a.C fue una colonia de Mesembria (actual Nesebar) que los griegos llamaban Heliópolis; más tarde los romanos la rebautizaron como Templum Iovis, luego los otomanos Gözeken, y el actual nombre de Obzor lo tiene sólo desde 1936.
Tiene apenas 2.000 habitantes, pero en los últimos años, durante julio y agosto su población se multiplica por diez, ya que vienen turistas de numerosos países a pasar sus vacaciones (principalmente rusos, escandinavos y de países balcánicos).
En los últimos 10 años ha experimentado un gran cambio y se ha convertido en un destino turístico muy codiciado en el Mar Negro. Se han construido recientemente muchos hoteles de cadenas internacionales, lo que aumenta en gran medida la capacidad de alojamiento del pueblo, que hasta hace relativamente poco contaba sólo con algunos hoteles de tamaño mediano y las habitaciones que alquilan los habitantes a los turistas.
![]() |
"Habitaciones libres" y "Vendo miel de abeja". Así sobreviven muchos ancianos en las pequeñas zonas turísticas. |
De hecho algunos de estos macro hoteles están sospechosamente cerca del mar, literalmente en la arena, y alguna vez se han llegado a inundar las plantas bajas si coincide marea alta con oleaje fuerte. Esto indica que probablemente en algún momento alguien se ha pasado la Ley de Costas por el forro. Chanchullos de este tipo hay en todos los países cuando hay dinero de por medio.
![]() |
La playa de Obzor. Al fondo a la izquierda se puede ver un edificio de apartamentos ¡en la arena! No puede ser legal. |
Nosotros vamos a ver Obzor cada año, básicamente porque en el pueblo de los suegros no hay ni tiendas ni restaurantes, ni una mísera farmacia, y para comprar comida tenemos que acercarnos a poblaciones más grandes (o sea, cualquier otra). La primera vez que estuve en Obzor no había casi nadie y ahora en agosto está petado, pero en junio y la primera mitad de julio es genial, y también la primera de septiembre.
¿Qué tiene de atractivo Obzor?
1. Una playa fantástica.
La playa de Obzor es una enorme bahía de 10 km (dicen que es la más larga de Bulgaria), con arena fina y dorada, y agua limpia. Como toda la costa búlgara, esta playa también está orientada al Este. Todavía no está tan masificada como otras playas del litoral, y aunque agosto es el mes más concurrido, aún se puede plantar la sombrilla sin estar pegado al vecino.
![]() |
Estas no cuentan porque son las sombrillas que ponen los hoteles. |
Algún año ha habido medusas, pero no es lo habitual. Hay socorristas cada poco, pendientes de la gente, y los bañistas suelen ser jubilados o familias con niños pequeños, es decir que el ambiente es relativamente tranquilo.
Para los más inquietos hay numerosas actividades aventureras, como windsurf, parasailing, motos acuáticas, etc.
Lo que más me gusta a mí de esta playa (podéis reíros) es que la gente es normal, con aspecto normal. Gorditos, delgados, fofisanos, piel blanco nuclear o rosa gamba... No hay bañistas del tipo supermodelo mega fashion que te hacen sentir fatal. ;)
2. El parque de Palmas:
El parque de Obzor está al lado de la playa, de hecho una parte llega hasta la arena. No es muy grande pero está muy bien cuidado, hay columpios para los más pequeños, fuentes, bancos, glorietas, mucha sombra... Ideal para ir con niños o sentarse a comer un helado o una rica palachinka (crep). Hay un pequeño teatro que se utiliza para conciertos y eventos similares, y se pueden ver restos del templo romano de Júpiter.
3. El centro de Obzor:
Hay una hermosa fuente en la cual están escritos los 7 nombres de la ciudad, una torre del reloj, un ajedrez gigante... Los habitantes de Obzor ponen todo el verano stands de souvenirs, material de playa, comida para llevar, etc. Agobia un poco pero es bonito y al fin y al cabo, viven de esto.
En verano suele haber espectáculos gratuitos de música y baile. La última vez que fuimos, por ejemplo, había un bonito show en el centro en el que adolescentes de varios nacionalidades representaban los bailes típicos de sus países, vestidos con trajes tradicionales. Por lo que me contaron, les invita el Ayuntamiento y se pagan las vacaciones dando varios espectáculos de ese tipo.
En Obzor hay también un pequeño museo que reúne una colección histórica y etnográfica con objetos que comprenden desde el siglo V a.C hasta la actualidad. Eso sí, confieso que nunca lo he visto abierto y tiene pinta de abandonado.
Además hay una pequeña iglesia ortodoxa que por dentro es simplemente maravillosa, con unos frescos muy coloridos y alegres, y un iconostasio precioso.
![]() |
Iglesia Sv. Ioan Predtecha |
Durante el verano hay muchos bares, clubs, restaurantes, y hasta una discoteca en las afueras, aunque casi todo cierra en cuanto acaba la temporada turística, a principios de septiembre.
Mi restaurante favorito en Obzor es el "Studen Kladenets" (nombre que significa "pozo frío"). Un típico restaurante familiar con trato excelente, children-friendly, que ofrece comida tradicional búlgara deliciosa y a precio estupendo. Una comida para seis nos suele salir a 20-25 euros, aproximadamente, aunque no solemos pedir postre.
4. Fortaleza de Kozyak, a las afueras de Obzor.
No puedo aportar muchos datos porque no he ido nunca, sólo sé que está entre Obzor y Byala (el pueblo de al lado) y que apenas quedan los cimientos y restos de alguna torre.
5. Área protegida de Irakli:
A 9 kilómetros al sur de Obzor se encuentra el área protegida de Irakli. Como el acceso es complicado, (hay que ir en coche a través de caminos muy, muy rurales, cruzando cultivos) hay mucha menos gente.
La playa (de 3 km) por tanto está bastante vacía de turistas convencionales, y está permitido acampar, por lo que es habitual ver tiendas de campaña en la arena. Es una zona realmente preciosa y que no haya edificios a la vista la hace aún más atractiva.
![]() |
Evgord, Wikipedia |
Irakli fue declarada área protegida en 1994 porque es hábitat de especies raras y en peligro de extinción como el lirio de arena.
Antes ibamos una vez al año, pero este verano hemos visto unos carteles que indicaban que está prohibido plantar ahí tu propia toalla, y que el alquiler de sombrilla y tumbona cuesta 36 levas. 18 euritos de nada. No sé qué se han fumado, pero en otras playas búlgaras eso cuesta como mucho 5 levas, y en Burgás incluso es gratis. Pues adiós, Irakli, que te disfruten los ricos.
***
Resumiendo, en general me gusta Obzor porque el tipo de turismo que atrae es bastante familiar y tranquilo, no como Sunny Beach que es más agobiante, y porque aunque empieza a ser un sitio conocido aún no está demasiado masificado. ¡Esperemos que dure!
¿Habéis estado alguna vez en Obzor? Si no conocéis la zona, os la recomiendo.